Así respondió al ser preguntado en la rueda de prensa de los jueves por los cambios en el Ejecutivo de Zapatero, en la que dijo que, "en política, un nuevo Gobierno se produce cuando se cambia al presidente del Gobierno. Por lo tanto, el nuevo Gobierno será el que después de las próximas elecciones generales presida Mariano Rajoy. Ese será el auténtico nuevo Gobierno que practicará nuevas políticas".

Para Gallardón, es más noticia los componentes del Ejecutivo que cambian de responsabilidad que las nuevas incorporaciones. Además, el alcalde se quedó con la valoración que, a su juicio, hizo ayer Zapatero sobre las razones de los nombramientos y cambios, al hablar de que son personas con más capacidad de explicación y comunicación.

"Si lo que preocupa al presidente del Gobierno no es que la gestión no sea la adecuada, sino única y exclusivamente que no se haya conseguido una comunicación, una información de esa gestión, yo creo que lo que nos está diciendo es que va a haber una continuidad en la gestión; y lo que nosotros criticamos del Gobierno socialista no es su acierto o desacierto en la comunicación de sus políticas, sino las propias políticas que está realizando", manifestó.

Por ello, Gallardón dijo que el PP seguirá ejerciendo su labor de oposición y de construcción de un modelo de alternativa, no a las políticas de comunicación del Gobierno, sino a sus políticas económicas y de gestión sobre los asuntos que interesan a los ciudadanos.

"Yo no soy de los que piensa que una buena comunicación puede suplir una mala gestión. Creo que por muy acertado que se esté en la comunicación, al final los ciudadanos con lo que se quedan es con el fondo y no con la forma", opina el alcalde, para quien Zapatero no hizo ayer "ningún propósito de enmienda en la gestión" ni apuntó ningún cambio de rumbo en su política, que ha supuesto un agravamiento de la crisis.

El alcalde no quiso entrar en valoraciones de los ministros ni en particularidades sobre si unos u otros serán capaces de comunicar mejor o de mejorar la imagen del Gobierno. "Lo que sí digo es que en una democracia madura la valoración de los ciudadanos no es por la imagen, y vuelvo a reiterar: una buena explicación jamás suple una mala gestión", concluyó.