Así lo señala en su informe de análisis del APE, publicado este martes, en el que estima “improbable” que se alcance la reducción del gasto del 2,4% del PIB prevista en el Programa de Estabilidad, asegurando que las medidas contempladas en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) así como las incorporadas durante su tramitación parlamentaria, “dificultan dicho resultado”.

En cambio, la Airef sí considera “factibles” las previsiones de ingresos así como la senda de deuda pública sobre PIB recogidas en la APE 2018-2021. En concreto, el organismo presidido por José Luis Escrivá considera que la composición del crecimiento para el período 2018-2021 “es verosímil, aunque cabe destacar la evolución contenida de la demanda interna en el corto plazo”.

INGRESOS

Sobre el aumento de los ingresos, la Airef considera que “la robusta creación de empleo junto con la recuperación de precios y salarios y el repunte de la actividad inmobiliaria apoyan un comportamiento dinámico de los principales ingresos”.

En esta misma línea, explica que la aparición de inflación tanto de precios como salarial también supondrá una mayor aportación al crecimiento de la recaudación a través tanto del IRPF como de las cotizaciones sociales y del IVA.

En cuanto al Impuesto de Sociedades (IS), la Airef prevé “un cierre progresivo de la brecha existente entre las bases macroeconómicas del impuesto y sus bases contables, mejorando así la recaudación esperable por el ciclo económico”.

Por otra parte, la autoridad fiscal estima que la previsión del Gobierno sobre el crecimiento del consumo privado es “prudente” y que la relativa a la consolidación de la aportación positiva del sector exterior al crecimiento de la economía española es “factible”.

GASTO

Por el lado del gasto, el informe señala que la evolución de los gastos necesaria para cumplir con los objetivos de déficit “supone un sobrecumplimiento de la regla gasto en el periodo 2018-2020 que no parece plausible con la información disponible sobre las medidas adoptadas”.

En este sentido, añade que el proyecto de PGE para 2018 recoge algunas medidas de incremento del gasto entre las que destaca la aplicación del acuerdo sobre la retribución de los empleados públicos y la revalorización de las pensiones.

Por ello, la Airef considera que “la restricción prevista en el consumo público no es consistente con el impacto de las medidas adoptadas en materia de personal, ni con las previsiones de evolución del gasto sanitario recogidas en la APE”.

RECOMENDACIONES

Por último, la Airef señala en su informe una serie de recomendaciones entre las que destaca la necesidad de establecer “una planificación presupuestaria consistente a medio plazo que tenga en cuenta tanto la factibilidad económica, social y presupuestaria de la senda planteada como la sostenibilidad de las finanzas públicas”.

En este sentido, considera que la APE “debe evitar convertirse en un ejercicio relativamente formal de fijación de una senda de reducción de déficit, no sustentada en medidas con un grado de concreción suficiente”.

Así, recomienda que, “para garantizar la coherencia y credibilidad de la planificación presupuestaria a medio plazo, sería conveniente que se fraguaran mayores consensos, siendo imprescindible un mayor debate y participación de las diferentes administraciones y agentes” en los procesos de elaboración de presupuestos a medio plazo.