Así lo dijo Sevilla en su intervención en unas jornadas sobre el sector financiero organizadas por Deloitte, 'ABC' y Sociedad de Tasación.

El consejero delegado de Bankia repasó los pilares más importantes del Plan Estratégico con un horizonte hasta 2020, con el que prevé elevar el beneficio neto hasta los 1.300 millones en 2020, y que la entidad presentó el pasado mes de febrero.

Este directivo comenzó repasando el proceso de integración de Banco Mare Nostrum (BMN), que ha supuesto la salida de 2.000 trabajadores de la entidad y que indicó que se completará a finales de este año.

“Todas las oficinas de la antigua red de BMN ya tienen la imagen de marca de Bankia”, explicó, y quiso poner en valor que este proceso ha supuesto un esfuerzo “importante para todos nuestros empleados”, de cara a facilitar la integración.

Tras la fusión, señaló que “tenemos una oportunidad clara en el entorno de los nuevos clientes de BMN” para crecer en líneas como el crédito al consumo o en fondos de inversión.

Sevilla también se refirió a los distintos planes de acción que ha llevado a cabo la entidad, como las iniciativas sin comisiones, y apuntó que durante 2016 y 2017 ha crecido en más de 280.000 nóminas, lo que “ha supuesto un cambio de tendencia muy importante”.

En cuanto a la digitalización, indicó que Bankia observa una “tendencia clarísima” en los nuevos clientes. Sevilla subrayó que los canales digitales de los que dispone la entidad están “a la altura del mejor competidor”, aunque aseguró que “en este mundo es difícil generar ventajas competitivas estables, y este es un reto que tenemos todos” y que “requiere del trabajo permanente”.

Asimismo, indicó que el banco va a poner el foco en los medios de pago, que “va a ganar competitividad” próximamente.

En este sentido, señaló que “tenemos un compromiso en crecimiento de ingresos por comisiones muy vinculados a fondos de inversión, seguros y medios de pago”.