La gravedad en Marte altera el desarrollo de las plantas
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Un equipo de internacional de investigadores con participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha comprobado que las condiciones de microgravedad, como las de Marte, y las de hipergravedad en exoplanetas alteran el desarrollo de las plantas. Según el estudio, en tales condiciones se produce una división celular prematura que provoca células de menor tamaño.
Los resultados se obtuvieron tras dos estudios coordinados por el investigador Raúl Herranz, del Centro de Investigaciones Biológicas, que se publican en las revistas ‘NPJMicrogravity’ y ‘Scientific Reports’. En la investigación se utilizaron instalaciones de la Agencia Espacial Europea, que simulan los efectos de microgravedad y gravedad parcial como las que experimentarán los astronautas, y las plantas que los acompañarán en una futura misión de exploración al planeta Marte.
El investigador Javier Medina, que dirige el grupo de investigadores del Centro de Investigaciones Biológicas que participó en el estudio, explica que “en los experimentos de este estudio se han utilizado pequeñas plántulas de ‘Arabidopsis thaliana’ en nuevos simuladores en tierra que pueden reproducir la gravedad de la Luna (1/6 de la terrestre) y la de Marte (algo más de 1/3)”.
Esta planta modelo, que ya fue expuesta a la microgravedad en sucesivos experimentos en la Estación Espacial Internacional (Root, Genara, Seedling Growth) por el mismo grupo del CSIC dirigido por Medina, sufre importantes desarreglos al principio de su desarrollo en el espacio.
“Los resultados insisten en los desarreglos del desarrollo de las plantas, de forma muy moderada en condiciones de hipergravedad, y similares aunque de menor intensidad a la microgravedad en las condiciones marcianas”, señala el investigador. “Proponemos que existe un cambio en la velocidad de las distintas fases del ciclo celular que conducen a una división celular prematura en el espacio, que provoca células de menor tamaño, aunque el mecanismo preciso por el que se produce este efecto sigue bajo estudio por nuestro grupo”, explica Medina.
El investigador considera que “aunque los resultados obtenidos en simuladores solo pueden ser validados mediante estudios en microgravedad real, es evidente que se puede aplicar a la mejora de las condiciones de crecimiento de las plantas que serán parte del sistema de soporte vital (para alimento y bienestar psicológico de los astronautas) en viajes espaciales”.
Los dos experimentos, en los que ha participado el Centro de Investigaciones Biológicas, se desarrollaron en el contexto de proyectos de colaboración internacional financiados por la Agencia Espacial Europea (ESA).
(SERVIMEDIA)
23 Abr 2018
ARS/caa