En concreto, DBRS ha subido el rating de la deuda a largo plazo del Santander a ‘A alto’ desde ‘A’, con perspectiva estable, y el de corto plazo hasta ‘R-1 medio’.

En el caso del Popular, entidad adquirida por el Santander el pasado mes de junio tras su resolución, se mejora su calificación a largo plazo hasta ‘A alto’ y en el caso del corto plazo, hasta ‘R-1 medio’.

Además, se ha mejorado la calificación de BBVA, desde ‘A’ hasta ‘A alto’, y la tendencia se mantiene en estable.

Por su parte, ha elevado el rating de CaixaBank a largo plazo hasta ‘A’, y como consecuencia el de una seria de instrumentos de deuda de la entidad catalana.

Estas subidas del rating se producen tras la mejora de la calificación de la deuda soberana española por parte de DBRS el pasado 6 de abril.