Ésta es la conclusión a la que ha llegado José Luis Tellería, investigador de la Universidad Complutense de Madrid, José Luis Tellería, en un estudio publicado en ‘Ardeola: International Journal of Ornithology’, que es la revista científica de SEO/BirdLife.

El artículo analiza las posibles causas que podrían estar detrás de la caída en picado de esta especie en el País Vasco, donde tradicionalmente ha sido abundante en sus campiñas. De hecho, en Bilbao y su entorno forma parte del grupo de aves denominadas popularmente como ‘Txinbos’, compuesto por más de 20 especies de aves insectívoras y canoras, en otros tiempos muy cazadas por los lugareños, pero a día de hoy todas ellas protegidas.

Para estudiar la evolución de la población de alcaudón dorsirrojo, Tellería escogió dos puntos separados entre sí 50 kilómetros y, a su vez, representativos del hábitat reproductor de esta especie en el País Vasco. Por un lado, el municipio de Ea, una zona de campiña costera dedicada a la producción de heno y, por otro, un área de pastos y brezales de interior, en Landa, ambos en la provincia de Vizcaya.

Se trataba de averiguar si estas poblaciones de alcaudón dorsirrojo habían disminuido antes del inicio del programa de seguimiento de aves comunes (Sacre) de SEO/BirdLife en el País Vasco, en 1998. Desde esta fecha, la organización ambiental ha detectado una caída del 58% en 2015 y del 75% en 2016 de la especie en la comunidad vasca.

Pero estas cifras son aún más dramáticas si se consideran los datos previos al Sacre. “Concretamente desde 1974-1975 los resultados de los censos indican un colapso de las dos poblaciones estudiadas, con una pérdida del 95% de las parejas reproductoras en los últimos 40 años”, explica Tellería.

Precisamente, el número de parejas reproductoras en Ea pasó de 24 y 21 en 1974 y 1975, respectivamente, a sólo una pareja en 2014 y a ninguna en 2016. De igual manera, las de Landa cayeron de 22 en 1974 y 15 en 1975 a dos parejas en 2014 y a sólo una en 2016. Combinando los resultados de ambas localidades, la cifra media de parejas pasó de 41 a 2, es decir, se ha perdido el 95% de su población en un periodo de 40 años.

DESCENSO EN ESPAÑA

De igual manera, en el conjunto de España también muestra una tendencia negativa, ya que la especie ha perdido algo más del 50% de sus individuos desde 1998, según datos del Sacre. Unas cifras que contrastan con la evolución del alcaudón dorsirrojo a escala europea, donde, según el Consejo Europeo para el Censo de Aves (EBCC, por sus siglas en inglés), la especie se encuentra estable hasta 2015.

Tellería indica que el descenso en el País Vasco se debe a procesos distintos a la alteración del medio: “Dadas las diferencias ambientales entre Ea y Landa, puede concluirse que el colapso poblacional de ambas poblaciones está relacionado con una influencia medioambiental que ambos lugares comparten. Esto excluye también el efecto de la proliferación urbana, que ha sido alta en Ea pero extremadamente baja en Landa”, explica.