Lo dijo en la clausura de la Escuela de ‘Buen Gobierno’ que los socialistas celebraron estos días en Madrid y con la que Sánchez quería evidenciar que la “unidad está recompuesta”, lo que algunas ausencias impidieron.

Con el respaldo del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, que lo acompañó junto con el también ex secretario general del PSOE Joaquín Almunia en la escuela y en este cierre, Sánchez agradeció a los presidentes autonómicos que han participado en el encuentro, “a todos y cada uno de ellos y de ellas”, el trabajo que hacen al frente de las instituciones, porque “unen aquello que la derecha siempre separa cuando gobierna”.

Destacó que los presidentes autonómicos unen “educación y equidad, sanidad y calidad, política y ejemplaridad, futuro y esperanza”.

“Y digo todo esto porque estamos a casi un año de las elecciones municipales y autonómicas y europeas”, y porque “estamos tocando con la punta de los dedos ser la primera fuerza política de este país”, lo que animó a los cerca de 800 presentes a aplaudir.

“Podemos ser la primera fuerza política en este país, y lo que os pido es que todos trabajemos duro para recuperar esa confianza”, “no por nosotros, sino por los ciudadanos, que necesitan del PSOE para reconstruir el Estado del bienestar y combatir las marginalidades”, animó.

Como cierre de su intervención, Sánchez tomó nota de la lección de Zapatero en esta escuela de que el líder siempre tiene que ser optimista y afirmó que “tenemos que ganar y ser la primera fuerza política”, porque “si ganamos las elecciones municipales, da igual los gritos que den, porque quien gana las elecciones municipales gana las elecciones generales, así que a trabajar y a ganar”.