Así lo anunció este martes la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García, tras reunirse en Madrid con el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca de la Región de Murcia, Francisco Jódar. “Vamos a poner en marcha los nuevos pozos para poder facilitar esta extracción de agua en el Sinclinal de Calasparra, en Las Vegas (Media y Baja), en el Molar y en Hellín”, informó la secretaria de Estado.

El agua de estos pozos de sequía se destinará al abastecimiento de la población, al regadío en la cuenca del Segura y a mantener la circulación de caudales ambientales en el río Segura, según aseguró Medio Ambiente.

Estas actuaciones tienen un presupuesto cercano a 10 millones de euros y se harán con carácter inmediato y de manera secuencial, siguiendo las decisiones de ahorro y de uso eficiente del agua adoptadas de manera unánime en la pasada Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS).

La cantidad máxima extraíble dependerá en última instancia de la evolución de la piezometría de los acuíferos y del Programa de Seguimiento y Vigilancia Ambiental, así como de la salinidad de las aguas sobre todo en las zonas bajas de la cuenca. Las obras de emergencia se hacen al amparo del vigente real decreto de sequía en la cuenca del Segura, prorrogado hasta el próximo 30 de septiembre.

El organismo de cuenca comenzará con la apertura de los pozos del Sinclinal de Calasparra, continuará con la batería de pozos de la Vega Media y con los de Hellín y El Molar (estos últimos en trámite de exención de evaluación ambiental). En la última fase se abrirán los de la Vega Baja, que requieren un mayor trabajo para su puesta en marcha. La extracción en estos sondeos está supeditada a la calidad de las aguas.