El grupo señala en un comunicado que estas pérdidas de 2017 "provienen en su gran mayoría del impacto del convertible de ACS por importe de 142 millones, que ya ha sido refinanciado y que no implica salida de caja de la compañía"

La compañía tuvo unos ingresos de 1.301 millones, lo que supone un aumento del 16%, y el Ebitda creció un 144%, hasta los 215 millones.

El grupo contaba a 31 de diciembre de 2017 con 5 millones de líneas móviles activas y con 504.000 clientes de banda ancha fija, lo que supone incrementos del 17% y del 312% sobre la cifra reportada al cierre del ejercicio 2016.

En el ejercicio 2017 el grupo captó 400.000 portabilidades móviles netas, y 174.000 portabilidades netas en el negocio de banda ancha fija.

Durante el año pasado, el grupo invirtió 221 millones dedicados principalmente al desarrollo de su red de fibra y generó un 'cash flow' recurrente de 210 millones.

“Estamos muy satisfechos con los resultados obtenidos por el grupo en 2017 y por haber sido capaces de batir las últimas previsiones comunicadas al mercado. En 2018 esperamos continuar creciendo tanto en ingresos, como en clientes y rentabilidad”, dijo Meinrad Spenger, consejero delegado. “Además, este año vamos a invertir más de 300 millones en continuar desarrollando nuestras redes de alta velocidad de fibra y móvil para ofrecer la mejor calidad de servicio a nuestros clientes”.