Guindos trabajará en el BCE con “lealtad e independencia” para el “bienestar de todos los ciudadanos europeos”

- Advierte de que la política monetaria no es “omnipotente” y pide que los Estados “no demoren” las reformas estructurales

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, se comprometió este lunes a trabajar “con lealtad e independencia para el beneficio y el bienestar de todos los ciudadanos europeos” desde la Vicepresidencia del Banco Central Europeo (BCE).

Así lo indicó en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, en el marco del proceso para ser nombrado vicepresidente del Banco Central Europeo. El titular de Economía señaló que el BCE ha empleado distintos instrumentos de política monetaria en la reciente crisis económica y financiera, aunque alertó de que “esto no debería llevarnos a creer que la política monetaria es omnipotente”.

De Guindos indicó que el “éxito” de las medidas implementadas por el BCE no hubiera sido posible sin las iniciativas adoptadas para fortalecer la Unión Económica y Monetaria. Como ministro de Economía, dijo, tuvo la oportunidad de participar en la definición de estas iniciativas, y destacó que esa experiencia es, precisamente, uno de los “principales activos” que podrá aportar al Banco Central Europeo: “Una visión general para evaluar qué acciones son las más adecuadas en cada momento”.

Por otro parte, señaló que para que los beneficios de la política monetaria se materialicen plenamente es “determinante” que los países “no demoren la implementación de las reformas estructurales requeridas, que son el mejor instrumento de reducción de riesgos en una unión monetaria”.

Según De Guindos, no se puede olvidar que la crisis no ha sido causada por la existencia de diferenciales fiscales sino por las diferencias de competitividad que llevaron a la acumulación de “desequilibrios insostenibles”. Por ello, subrayó, “es clave que los países avancen” en las reformas.

De Guindos hizo un repaso a las distintas medidas adoptadas por el BCE durante la crisis, tanto las convencionales como las no convencionales, para agregar que el organismo “ha combinado y calibrado adecuadamente estos instrumentos”.

Hay una amplia evidencia, comentó, de que este estímulo monetario “ha aliviado sustancialmente las condiciones financieras”, lo que ha favorecido los flujos de crédito a los hogares y las empresas y el crecimiento económico. A la luz de la efectividad de estas medidas, hay “más confianza” de que la inflación convergerá gradualmente al objetivo de situarse en el entorno del 2% a medio plazo.

(SERVIMEDIA)
26 Feb 2018
BPP/gja