Esta cima, de 2.465 metros, tiene tan solo cuatro metros menos que la más alta, la del monte Galdhøpiggen, que fue ascendido por el equipo expedicionario de la 1ª edición del Curso Superior de Montañismo para Ciegos y Adaptado el 3 de junio de 2017.

Igual que sucedió con este hito anterior, tampoco antes ningún grupo de montañismo para ciegos ha pisado la cumbre del Glittertind, y menos aún en un contexto docente, así que el intento de ascenso, o su ascenso si es posible, también será un hecho inédito en la historia de la disciplina.

El equipo expedicionario de 21 montañeros está compuesto por tres profesores videntes, dos instructoras ciegas, cinco alumnos, diez voluntarios del Grupo de Montaña de la ONCE de Madrid y un jefe de prensa.

El objetivo del curso es llevar a buen término la primera experiencia a nivel mundial de docencia de guiado de ciegos en montaña en contexto de expedición adaptada en su segunda edición, probar sobre el terreno dos aplicaciones de geoposicionamiento para ciegos desarrolladas por una empresa española con tecnología nacional e impartir a los alumnos sobre el terreno enseñanzas técnicas avanzadas de seguridad alpina y rescate en glaciar.

Durante los seis meses que van desde el comienzo del curso hasta el inicio de la expedición en sí, los alumnos recibirán tres temarios referentes a diversos aspectos relevantes de una expedición de montaña, y especialmente de una adaptada; apuntes específicos sobre materiales y técnicas de progresión en glaciar, y una prueba que consiste en el análisis pormenorizado del vídeo de una expedición andina realizada por el Grupo de Montaña de la ONCE en 2003.

Por último, otro objetivo es ampliar el número de personas bien formadas en España para hacer más asequible a las personas con discapacidad, y especialmente a los ciegos y deficientes visuales, su acceso al disfrute del medio natural tanto en su vertiente de ocio como deportiva.