Así se pronunció el jefe de la diplomacia española durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados en respuesta a una pregunta del diputado de Podemos Pablo Bustinduy sobre los motivos por los que el Ejecutivo no ha ratificado este tratado.

El ministro subrayó que el espíritu que inspira esa norma es compartido por “toda la humanidad y por este Gobierno”. No obstante, señaló que el “problema” que presenta es que busca alcanzar el objetivo con el que fue concebido por el “camino equivocado”.

Prueba de ello, dijo Dastis, es que ninguno de los países que lo han firmado y ratificado cuenta con armas nucleares. También llamó la atención sobre el hecho de que este tratado “socavará” el Tratado de No Proliferación Nuclear (NPT, por sus siglas en inglés).

El ministro concretó las tres razones por las que no se ha suscrito el Tratado de Prohibición de Armas Nucleares: para “preservar” el NPT, por “solidaridad” con la OTAN y en aras de lograr el “mayor consenso posible en el multilateralismo”.

Contrastó el grado de adhesión del Tratado de Prohibición de Armas Nucleares (firmado por 56 estados y ratificado por cuatro) frente al NPT (ratificado por 190 países), reiteró que el primero “divide” a la comunidad internacional y aseveró que el Gobierno mantendrá su compromiso con el segundo.

Por su parte, Bustinduy lamentó que el Gobierno no haya ratificado el Tratado de Prohibición de Armas Nucleares en un momento en que hay “más armas nucleares en manos de más países que nunca” y “episodios de tensión que no veíamos en décadas”.

Por ello, exigió que el Ejecutivo no adopte una “posición subalterna y obediente” a la OTAN y que no se comporte como un “vasallo geopolítico” del presidente de EEUU, Donald Trump.