Según informó en un comunicado, la implantación de la factura electrónica desde el 1 de enero corresponde a criterios ambientales, de eficiencia y de simplificación documental.

Además, señalan que la medida se verá ampliada con “la progresiva implantación de la contratación electrónica, que este mes de febrero comenzará para los clientes del servicio ‘quantum’”.

De esta forma, explicaron que estas iniciativas, integradas dentro de su sistema de gestión ambiental, “tienen como principal objetivo reducir el consumo de papel y su consiguiente impacto medioambiental”.

En este mismo sentido, destacaron que también supondrán “mejoras importantes para sus clientes, tales como la rapidez en el envío y recepción de documentos o el ahorro de tiempo de gestión”. Según la compañía, este cambio evitará que se impriman alrededor de 64.000 documentos al año.