Este Plan obligará a reformular en un plazo de tres años la composición de más de 3.500 productos que respresentan el 44,5% de la energía diaria . Entre estos alimentos destacan los platos preparados, productos lácteos, derivados cárnicos, aperitivos salados, bollería y pastelería, cereales de desayuno infantil, cremas, bebidas refrescantes, néctares de frutas, helados, galletas, salsas y pan especial envasado.

Los productos incluídos en este Plan aportan el 44,5% de la energía de la cesta total de la compra de la familia española, por lo que en este proyecto se han comprometido de forma voluntaria más de 500 empresas para reducir la sal, el azúcar y las grasas saturadas.

A este respecto, Montserrat subrayó en la firma de este acuerdo que “este Plan pionero mejorará la composición de los alimentos para favorecer la salud de los españoles y prevenir las enfermedades crónicas, ya que la promoción de la salud de los ciudadanos es nuestra prioridad por lo que se mejorará no sólo los productos que conumimos en casa sino también los menús escolares y de los hospitales para que sean más saludables”.

En relación con los establecimientos, se tomarán medidas como reducir el 50% el contenido de azúcar en los sobres monodosis y el 33% de la sal en sobres monodosis. Además, las empresas de máquinas expendedoras de alimentos y bebidas se comprometen a adquirir sólo alimentos equilibrados y reducirán el 15% la dosis máxima de azúcar añadido.

En este sentido, la vocal de la Agencia Española de Consumo, seguridad alimentaria y nutrición ((Aecosan), Mariam Dal Re, subrayó durante la presentación del Plan que “en España se consume una media de 9,8 gramos de sal al día mientras que la dosis recomedada es de 5 gramos. En cuanto al consumo de azúcar, la población infantil de entre 3 y 9 años de edad está muy por encima de los estándares recomendados, por lo que este Plan pretende reducir la obesidad y el sobrepeso en todas las edades”.

Por ello, aseguró la ministra de Sanidad, “este Plan es una herramienta eficaz para luchar contra las tres enfermedades crónicas que más nos afectan como la diabetes, las patologías cardiovasculares y el cáncer. Además va a ser un gran beneficio para las futuras generaciones”.