Así lo recoge la proposición no de ley presentada hoy por el Grupo Socialista en el Congreso y que hace dos días anunció su líder, pedro Sánchez.

En un encuentro con los medios, Martínez Seijo indicó que en la actualidad ya hay 277.000 estudiantes que disfrutan de la exención de matrícula (dentro del modelo de becas vigente) y que, según la tasa de idoneidad, el 87% de los alumnos aprueba las asignaturuas en primera matrícula. De ahí sus estimaciones de un millón de beneficiarios, que se alcanzarían en cuatro años (la medida se introduciría de forma paulatina, empezando por las rentas más bajas).

Esto supondría una inversión adicional de entre 180 y 200 millones de euros anuales, hasta alcanzar los 730 millones en cuatro años, subrayó. "Si lo sumamos a los cerca de 300 millones que el Estado ya aporta para compensar a las universidades por la exención de tasas, la medida implicaría un gasto de 1.000 millones", recalcó.

OBJETIVOS

Según la portavoz socialista, esta propuesta pretende conseguir poner fin a los efectos del "tasazo" de 2013, que supuso un encarecimiento medio del 30% en el precio de la matrícula y dejó fuera de la educación superior a miles de estudiantes de familias con pocos ingresos. Además, prosiguió, el "tasazo" provocó que las diferencias de precios entre comunidades autónomas creciesen hasta el 60%.

"Nuestra intención es homogeneizar el sistema a nivel estatal", explicó, para lo que el PSOE pretende fijar un precio único de 16 euros el crédito en primera matrícula.

Por ello, el Grupo Socialista quiere que esta medida se aborde en el Consejo General de Política Universitaria, al que asisten los responsables autonómicos del ramo, pues "son ellos quienes tienen todas las competencias y aportan el 95% de la financiación".

A largo plazo, se trata de "extender el derecho a la educación superior y situarla como motor de desarrollo en la sociedad", concluyó Martínez Seijo.