En rueda de prensa, Arrimadas se dirigió directamente a quienes veían "un nuevo tono" en Torrent respecto a sus antecesores, y sentenció que empieza "con mal pie" proponiendo a Puigdemont para la investidura y visitándole en Bruselas con cargo al dinero público de todos los catalanes.

Puigdemont, subrayó, es una persona "huida de la justicia" con graves causas penales a sus espaldas, y Ciudadanos no consentirá que vuelva a ser presidente de la Generalitat. De momento, han pedido a la Mesa del Parlamento de Cataluña una reconsideración de la decisión de proponer a Puigdemont como candidato.

Arrimadas aseguró que Puidemont no puede ofrecer a los catalanes otra cosa que no sea "show mediático", algo que en Cataluña "hace tiempo que sobra", y le emplazó por ello a asumir "que su tiempo ha pasado". En cuanto a Torrent, le recordó que tiene que ser el presidente de los 135 diputados, también de los del partido que ha ganado las elecciones, y no el "emisario o abogado o representante" de Puigdemont y Junqueras.

Dejó claro que Ciudadanos luchará "hasta el final" para que no se siga "denigrando" al Parlamento de Cataluña y para que no sea presidente de la Generalitat una persona "huida" de la Justicia y que ha concurrido a las elecciones con "las siglas del 3%".