Según informó este viernes la citada agencia, de estos productos, 91 fueron detectados en frontera y se rechazó su importación, mientras que otros 335 fueron retirados del mercado y prohibida su comercialización.

En los 103 restantes fue el propio fabricante quien, como obliga la normativa, comunicó a las autoridades de consumo la existencia de posibles riesgos en sus productos y adoptó las medidas necesarias para paliarlos.

Juguetes (219), Vehículos y accesorios (85) y Productos eléctricos (50), son los que reunieron mayor número de notificaciones, en el caso de juguetes por la especial vigilancia a que están sometidos por los servicios de inspección al estar dirigidos a una población vulnerable y en vehículos y accesorios por el seguimiento que los propios productores efectúan en sus productos.

En cuanto a los países de los que procedían estos productos, China encabeza la clasificación con 342 alertas, seguida de España con 34, Francia con 19, Alemania con 14 y Japón con 12. El resto de países no superan la decena de productos, aunque hubo otros 44 en los que se desconocía su procedencia.