El secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CCOO, Carlos Bravo, afirmó antes de participar en la protesta, a la que acudieron centenares de pensionistas, que la movilización busca “el mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones y revertir la reforma de 2013”.

Además, criticó que la última propuesta de la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, es “el séptimo u octavo anuncio de medidas sobre el sistema de pensiones que se hacen a los medios de comunicación y no se concretan” y explicó que donde procede plantearlas es en la mesa de diálogo social y en la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo.

En este sentido, Bravo aseguró que lo contrario a tener confianza en el Pacto de Toledo es “colocar a las pensiones en el centro del debate político de corto plazo y esa es la mayor irresponsabilidad que se puede hacer”. “No es que tengamos confianza, es que es la mejor herramienta y apostamos por que se reconstruya”, destacó.

Por su parte, la secretaria confederal de UGT Adela Carrió añadió que la movilización de hoy busca “denunciar la subida de mierda que ha hecho el Gobierno a nuestros pensionisas, una vez más los vuelve a maltratar, el nivel de pobreza en ellos es abusivo”. Movilizarse “es la única manera de que el Gobierno nos haga caso y se ponga a trabajar en el Pacto de Toledo”, aseveró. El representante de CCOO agregó que las centrales continuarán con las movilizaciones porque “es una pelea que es fundamental para un quinto de la población española”.

A esta concentración asistieron, entre otros, los secretarios generales de CCOO y UGT de Madrid, Jaime Cedrún y Luis Miguel López Reillo, el exresponsable de CCOO Ignacio Fernández Toxo y algunos responsables del PSOE y Podemos.

En el acto los pensionistas se concentraron tras una pancarta en la que se podía leer 'Contra la congelación de pensiones, no al recorte social y salarial' y se pudieron escuchar gritos de 'más pensiones, menos ladrones'. Las movilizaciones continuarán en el mes de febrero.