Aena prohíbe desde hoy a sus trabajadores alimentar a animales en Barajas

MADRID
SERVIMEDIA

Los trabajadores del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas tienen prohibido a partir de este martes dar de comer a los animales dentro del recinto aeroportuario, al entrar en vigor una enmienda con modificaciones en la Normativa de Seguridad en Plataforma.

El boletín de seguridad operacional número 67 de Aena en Madrid-Barajas indica que este martes, 9 de enero, entran en vigor cinco nuevas normas de seguridad en plataforma, entre ellas “la prohibición de alimentar animales dentro del recinto aeroportuario”.

Aena señaló en Twitter que no se permitirá dar de comer a animales en la zona de movimiento de aeronaves para “evitar focos de atracción de animales, especialmente de aves, por el riesgo que supone para la aviación, los pasajeros y los propios animales”.

El gestor aeroportuario señaló a Servimedia que la Reglamentación Europea y de la Organización de Aviación Internacional ha identificado la fauna como uno de los mayores riesgos para la aviación y requieren que los aeropuertos dispongan de los procedimientos adecuados para gestionarla. Además, añadieron que la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA) exige también que los aeropuertos dispongan de esos procedimientos.

Aena explicó que, en lo referente al aspecto de alimentar a animales en el entorno aeroportuario, se comunicó en 2013 la prohibición de suministrar alimento a los animales en la plataforma, que es la zona de movimiento de aeronaves.

En este sentido, la enmienda que entra en vigor hoy recoge expresamente la “prohibición del suministro de alimento a animales, instalación de comederos o refugios, con el fin de controlar y gestionar de forma adecuada el acceso y presencia de animales en el interior del recinto aeroportuario para evitar que supongan un riesgo para la seguridad operacional de aeronaves, pasajeros, trabajadores y de los propios animales”.

Para llevar a cabo eficazmente la gestión del acceso y presencia de animales en el recinto aeroportuario, Aena cuenta en 33 aeropuertos con Servicios de Gestión de Fauna con personal especializado y procedimientos eficientes a los que destina 3,5 millones de euros anuales.

El Servicio de Gestión de Fauna de Aena “es el encargado de mantener libre de interferencias por animales las zonas en las que operan las aeronaves, realizando actuaciones cuando hay riesgo de que se produzcan esas interferencias”.

Para gestionar este riesgo, “es necesaria la colaboración de todo el personal del aeropuerto, con el fin de evitar prácticas que puedan ocasionar la presencia de colonias de animales no controladas”, remarcó Aena.

Por último, informó de que el Servicio de Gestión de Fauna lleva a cabo las actuaciones necesarias de recogida de animales, atención higiénico-sanitaria y en el caso de animales abandonados o sin propietario, entrega al Ayuntamiento de Madrid, que es el órgano competente de acuerdo a la normativa de aplicación, o aquellas entidades en quien delegue.

En el caso de la fauna silvestre, los animales son entregados en los Centros de Recuperación de Animales de las comunidades autónomas, a los agentes forestales o al Seprona, también conforme a la normativa de aplicación.

CRÍTICAS DE CSIF

El sindicato CSIF criticó esta medida, que supondría la apertura de un expediente disciplinario para el trabajador que alimente a un animal, al indicar que Aena debería “cuidar los animales que están o llegan al recinto aeroportuario”.

“Que los animales son un peligro y no deben estar en un recinto aeroportuario no es algo que nadie ponga en duda, es un peligro para aeronaves, personas y por supuesto para ellos mismos, pero cuando esos animales están o llegan, no se controlan como debían, no se puede sacar una nueva Normativa de Seguridad en Plataforma (NSP) que impida alimentar a los animales porque eso supone maltrato animal”, indicó el CSIF.

Este sindicato recalcó que “tendría su lógica” que Aena “sacara todos los (animales) posibles y que controle los que hay del mejor modo, pero lo que no puede hacer es prohibir alimentar a esos animales porque consiguen efectos contrarios, se mueven por todo el recinto en busca de comida, lo cual aumenta los riesgos”. “No cuidarlos o impedir que otros lo hagan es maltrato animal. Además, estos trabajadores siguen los protocolos de Madrid Salud”, añadió.

(SERVIMEDIA)
09 Ene 2018
DSB/MGR/gja/caa