Según la estadística, la tasa anual de los precios industriales fue tres décimas superior a la registrada en octubre.

Por destino económico de los bienes, entre los sectores industriales que tuvieron influencia positiva destaca energía, que presentó una variación anual del 6,3%, casi dos puntos y medio por encima de la del mes anterior, a causa de la subida de los precios del refino de petróleo, frente a la bajada registrada en noviembre de 2016.

Por su parte, los sectores industriales con influencia negativa fueron bienes intermedios, cuya tasa descendió siete décimas, hasta el 3,3%, debido fundamentalmente a la disminución de los precios de la producción de metales preciosos y de otros metales no férreos, que se incrementaron el año anterior. También bienes de consumo no duradero, con una variación del 1,5%, tres décimas por debajo de la registrada en octubre.

Mientras, la tasa de variación anual del índice general sin tener en cuenta la energía descendió tres décimas, hasta el 2%, con lo que se sitúa más de un punto por debajo de la del IPRI general.