Andalucía, la comunidad más solidaria, y Murcia y Canarias, las menos generosas en ayuda al desarrollo
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El informe 'La salud en la cooperación al desarrollo y la acción humanitaria 2017', hecho público hoy por las ONGD Médicos del Mundo y Medicusmundi, corrobora que la ayuda al desarrollo continúa estancada en España, en donde se dedica el 0,33 por ciento de la Renta Nacional Bruta. Sin embargo, algunas comunidades han incrementado sus ayudas, como Andalucía, País Vasco y la Comunidad Valenciana, mientras que Murcia y Canarias son las menos generosas.
El informe recuerda que España ha reducido su ayuda humanitaria más de un 90% desde 2009. En 2016 se dedicaron a ayuda al desarrollo "4.150 millones de euros, el 0,33% de la Renta Nacional Bruta. Pero de esta cantidad, 1.958,8 millones responden a una operación excepcional de condonación de deuda comercial a Cuba, que por su naturaleza no debería computar como AOD, lo que situaría la cifra destinada por España a atender las necesidades de las personas más pobres del planeta o aquellas que son víctimas de catástrofes o conflictos en un pírrico 0,17%, muy lejos de la media europea, del 0,51%".
"En 2016 la acción humanitaria estatal volvió a quedarse bajo mínimos, con 51,3 millones de euros, apenas un ligero aumento de 5 millones sobre una ya raquítica cifra en el año anterior. Un incremento que se debe en su totalidad a las aportaciones de comunidades autónomas y ayuntamientos, lo que se conoce como AOD descentralizada. Andalucía, País Vasco y Comunidad Valenciana son las tres regiones que más aportan, por este orden, mientras que Murcia y Canarias se mantienen entre las menos generosas. Por el contrario, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación ha reducido un 10% sus fondos, pasando de 35,8 millones en 2015 a 32,5 en 2016", resalta el informe.
En lo internacional, el informe indica que 2016 ha sido un año marcado por los grandes gestos políticos que se han quedado en el aire, con los decepcionantes resultados tanto de la I Cumbre Mundial de Estambul como de la Cumbre sobre Migraciones y Refugio de la ONU. “Es especialmente grave el aumento de los ataques a personal e instalaciones humanitarias, que se han convertido en objetivo de guerra”, denunció José Félix Hoyo, presidente de Médicos del Mundo.
Otra de las principales conclusiones del informe es que los países de las economías más potentes del mundo han gastado más en atender las necesidades de quienes llegaban a sus países que en todas las crisis del mundo, donde se concentraban el 86% de las personas refugiadas y desplazadas y por tanto donde estaban las mayores necesidades. Así, paradójicamente, el territorio de la Unión Europea se ha convertido en el mayor receptor de ayuda al desarrollo del mundo.
(SERVIMEDIA)
19 Dic 2017
MAN/caa