En el cóctel posterior a la recepción oficial de las Cortes con motivo de la Constitución, el secretario general del PSOE y el presidente de Ciudadanos se cruzaron en el Salón de Pasos Perdidos, pese a la cantidad de personas concentradas en el mismo espacio. Entonces, en un breve intercambio de palabras, el líder del PSOE comentó lo mucho que le quiere Rivera pese a que le llama podemita. A lo que el presidente de Ciudadanos le respondió que él le llama “facha por defender la Constitución”.

Este cruce de comentarios que se dedicaron entre risas los dos dirigentes, hizo que incluso se comentara la posible reedición del ‘pacto Massimo Dutti’ - como algún presente denominó- que firmaron PSOE y Ciudadanos en febrero del 2016 para investir a Sánchez como presidente.

Si bien, este nuevo acuerdo sería para hacer a Inés Arrimadas o Miquel Iceta presidente de la Generalitat. Es ahí donde cada líder tira para su formación, porque los dos ven bien ese tándem siempre que su candidato sea el que logre la Presidencia.

Las risas entre Sánchez y Rivera contrastan con la actitud del líder del PSOE con el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, con el que no hablaba desde septiembre, pese a la buena relación que mantienen. Sánchez e Iglesias apenas estuvieron unos instantes conversando sobre Cataluña, lo suficiente para que el dirigente de Podemos le apuntara a Sánchez que el ‘método Borgen’ en Cataluña es el candidato de Cataluña En Comú-Podem, Xavier Domènech, y no Miquel Iceta (PSC) como ansían los socialistas. Sánchez le respondió con una sonrisa.