El jefe del Ejecutivo hizo estas valoraciones en conversación informal con los periodistas en la recepción oficial que tuvo lugar en el Congreso de los Diputados con motivo de los 39 años transcurridos desde la aprobación de la Constitución.

“Me trae sin cuidado lo que haga”, contestó cuando los periodistas le preguntaron por la posibilidad de que Puigdemont vuelva a Cataluña en plena campaña electoral. Desde Bruselas, el expresident señaló que tiene “intención de volver” desde el mismo momento en el que se fue pero que no hay “garantías” para ello.

Rajoy defendió que cualquier persona tiene que cumplir la ley, “ya sea conserje o presidente”. No quiso especular sobre los resultados de estos comicios, aunque dijo estar “muy tranquilo” ante el ascenso de Ciudadanos que recogen las encuestas. “¿Inés Arrimadas o Miquel Iceta?”, se le planteó, a lo que contestó tajantemente que su apuesta no es otra que Xavier García Albiol.

Defendió que el Partido Popular de Cataluña es “el único” del que se puede predecir su comportamiento tras las elecciones y prometió que estará “donde le corresponda” tras el 21-D. “El criterio del PPC no es de partido, es de lo que le interesa al país”, arguyó.

De manera irónica, otras fuentes gubernamentales incidieron en que no hay que obviar el papel que jugará Albiol: “Si Iceta quiere el Borgen, yo quiero el Borgen King”, dijeron sobre la hipótesis de que se reproduzca el ‘método Borgen’ (que un candidato de consenso llegue a la Presidencia pese a no estar entre los más votados).

Además, fuentes gubernamentales catalanas precisaron que en el momento post electoral “no se puede perder el tiempo” porque la sociedad exige pactos y soluciones, cansada de la parálisis de los últimos tiempos. Consideraron, además, que la participación va a ser “altísima” y el denominado bloque constitucionalista (Ciudadanos, PSC y PPC) ganará en votos.