En su manifiesto, el PCE destaca los ataques sociales que se han acometido durante la última legislatura y describe un panorama social de España muy negativo, al ser el país "con el nivel de paro más alto de la Unión Europea, con el empleo más precario y temporal, con una desindustrialización que afecta a comarcas enteras, con una degradación de los derechos sociales y sanitarios y con un aumeto de la marginalidad".

El PCE denuncia que las reacciones sociales y sindicales a los abusos "se limitan a una acción declamatoria y parcial, y, mientras, se espera a ver qué deparará el próximo Gobierno del PP, que está, parece, dispuesto a seguir la línea del anterior Gobierno, apretando aún más las clavijas de los trabajadores, como lógica continuación de las propuestas de las clases económicas dominantes de España".

Este partido cree que la contestación social y sindical debe cambiar, porque"nunca se han parado las políticas conservadoras y antiobreras, ni se han logrado avances sociales, si no ha habido luchas, presiones, fuerza e inteligencia de los movimientos sociales de izquierda".

El PCE advierte que si la pasividad social, que a su juicio es sinónimo de "acobardamiento social", continúa predominando sobre la movilización, "la vía de la regeneración económico-social favorable a los de abajo no se producirá". Por ello, hace un llamamiento a la particiapción en todas las movilizacions sociales y sindicales de mañana.