El proyecto se ha aplicado desde 1997 en 244 centros escolares de diez comunidades autónomas, Ceuta y Melilla. Además de haber conseguido reducir un 33 po ciento el número de alumnos que empiezan a ingerir alcohol, el plan ha logrado retrasar la edad de inicio en el consumo de tabaco en un 16,5 por ciento de los estudiantes acogidos a la iniciativa.

El desarrollo del programa también ha tenido efectos positivos en la prevención de la conducta antisocial de los escolares, ya que disminuyen las peleas y el uso de armas.

Los resultados del programa los presentarán mañana en detalle en un instituto de Madrid los ministros de Educación e Interior, Marino Rajoy y Jaime Mayor Oreja, y el delegado del Gobierno para el Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles.