Este servicio ha sido utilizado fundamentalmente por pacientes de edades comprendidas entre los 70 y los 79 años, aunque la media de edad se sitúa en los 7 años y el 57,9% son mujeres.

El mes de máxima incidencia fue noviembre, con 389 llamadas, y el viernes es el día de la semana con mayor demanda. El 84,9% de las llamadas tuvo lugar en horario de tarde-noche, con un pico máximo a las diez de la noche.

En el 60% de los casos el paciente no encesitó ningún recurso médico por no presentar patología, mientras que el 23,7%, 515 pacientes, sí necesitó de algún tipo de dispositivo. De estos últimos, 32 personas necesitaron una UVI móvil y de ellas 23 pesentaban una cardiopatía isquémica (infarto de miocardio, angina de pecho).

Por último, a un 15 por ciento de los asistidos se les aconsejó ir a su médico de cabecera para su observación y posterior seguimiento.

DIAGNOSTICO INMEDIATO

La posibilidad de realizar electrocardiogramas por teléfono conlleva una serie de ventajas para el ciudadano. La primera es que si el electro es normal, supone la tranquilidad inmediata para el paciente y sus familiares y se evita un traslado innecesario a un cento sanitario.

La segunda y más importante es que en el caso de que mediante la prueba se diagnostique un infarto de miocardio, se acortan los tiempos de atención al paciente en el periodo crítico de esta enfermedad.

Además, el electrocardiograma del paciente queda unido a su historial y almacenado en la base de datos del Centro de Coordinación de Urgencias del 061. De esta forma, se pueden consultar los antecedentes y la evolución de sus dolencias.

Este servicio de Electrocardiografía Transteefónica (ECGT) está operativo las 24 horas del día los 365 días del año y ya funciona en el casco urbano de Madrid y en las zonas rurales más alejadas de los hospitales.