Biodiversidad

Zorzales, codornices y pinzones son las aves más propensas a tener garrapatas en el noreste de España

- Según un estudio con datos de más de 620.000 aves a lo largo de 17 años

MADRID
SERVIMEDIA

Algunos grupos de aves, como zorzales, codornices y pinzones, son más propensos a tener garrapatas en el noreste de España.

Esa es la conclusión principal de un estudio llevado a cabo por la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), la Universidad de Granada y el Instituto Catalán de Ornitología (ICO), y publicado en la revisa ‘One Health’.

Las garrapatas son portadoras de numerosos patógenos que pueden afectar tanto a humanos como a los animales domésticos y silvestres. Se ha demostrado que muchos de estos patógenos transmitidos por las garrapatas también afectan a las aves.

Es el caso del virus de la fiebre hemorrágica Crimea Congo o de bacterias como la Borrelia, que pueden provocar graves enfermedades.

Las garrapatas pueden usar a las aves como vehículo de trasporte y viajan con ellas a lo largo de sus migraciones. “En el actual contexto de cambio global, estos movimientos pueden facilitar la llegada de garrapatas y sus patógenos a nuevas localidades y con ello contribuir a la emergencia o re-emergencia de enfermedades”, explica Jesús Veiga, investigador de la Universidad de Granada y primer autor del estudio.

VIGILANCIA Y CONTROL

Para realizar el estudio, el equipo empleó datos sobre la presencia de garrapatas en más de 620.000 individuos de 231 especies de aves capturadas por más de 200 anilladores voluntarios del ICO desde 2003 a 2020.

Al analizarlos, se encontraron importantes diferencias entre localidades y años, lo cual refleja el impacto que podrían tener las condiciones climáticas en los patrones de infección por garrapatas.

Además, algunas características asociadas a la especie de ave también influyeron en la probabilidad de infección. Los grupos con mayor prevalencia de garrapatas fueron, entre otros, aquellos que se caracterizan por reproducirse en solitario y habitar bosques, roquedos, matorrales y asentamientos humanos.

Ejemplos de ellos son los túrdidos (como mirlos o zorzales), los fringílidos (como jilgueros o pinzones) y los faisánidos (como faisanes y perdices). “Estos hallazgos pueden ayudar a mejorar el diseño de los programas de vigilancia y control de enfermedades transmitidas por garrapatas”, explica Jordi Figuerola, profesor de Investigación de la Estación Biológica de Doñana.

(SERVIMEDIA)
27 Mayo 2024
MGR/gja