Durante la sesión de control al Gobierno, Zaplana afirmó que España está dirigiendo sus esfuerzos para seguir reduciendo el nivel de temporalidad, que "ha permitido que la UE nos felicite por ser el país que más la ha reducido en los últimos tiempos".

Zaplana defendió que "lo estamos haciendo francamente bien reduciend en cuatro puntos la tasa de temporalidad" y "paliando" la situación que había en el año 96, "cuando sí existían contratos basura sin protección social".

El portavoz de Empleo del PSOE, Ramón Jáuregui, tachó de "anómalo y grave" el nivel de temporalidad, que "perjudica a los trabajadores, a la economía del país y a las empresas". Esta situación "se deriva de una politica laboral que está siendo fraudulenta con la ley, las empresas hacen fraude, hacen abuso de la ley".

Jáuregui denunció que "no ha vigilancia inspectora, no hay instrucciones sobre dónde y cómo actuar" y falta investigar el fraude en la contratación temporal y las ETT, algo que "ustedes no hacen nara para combatirlo", ya que "gran parte" de la competitividad española se basa en contratos precarios y bajos sueldos. "Somos los campeones de Europa en empleo barato, precario y siniestralidad", añadió.

La diputada socialista Isabel López i Chamosa aseguró que el 91% de los 12,8 millones de contratos que se firmaron en 2002 fueron temorales, cifra que se ha elevado al 91,4% en los nueve primeros meses de 2003. "Quiero tener un ministro que no salga en la televisión encantado de hacerse conocido, sino que tome medidas" para afrontar la temporalidad.

Zaplana replicó que el 79% del empleo creado en España desde 1996 ha sido de carácter indefinido y ha beneficiado a más de tres millones de personas y resaltó que la tasa de temporalidad ha caído del 35,2% en el que estaba en 1995 al 30,74% que deparó la última Encuesta de Población Actva.