Zaplana hizo estas reflexiones en el curso de un encuentro informativo con la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) celebrada en el Senado.

El presidente autonómico quiso manifestarse "contundente y radical" a la hora de afirmar que no tiene ningún tipo de "ambiciones políticas" en ese sentido, y que todas sus aspiraciones se colmarán si es capaz de dejar "un buen recerdo" de su gestión como presidente de la Comunidad Valenciana.

"Estoy feliz en la responsabilidad que tengo y mi máxima aspiración es dejar un gratísimo recuerdo de mi gestión. Lo digo con total sinceridad, aunque si ustedes no me creen están su perfecto derecho", aseguró.

Para el dirigente popular, la iniciativa de Aznar de compromenterse a dejar el cargo tras dos legislaturas fue "un acierto" en el momento político en que la hizo. En un clima de crispación y deterioro de la confianza de los cidadanos en los políticos, la iniciativa representó una "voluntad regeneradora".

Pero ahora es un planteamiento "equivocado", porque el panorama político ha cambiado sustancialmente y en este momento es una decisión "que no me gusta". "¡Ojalá volviera a presentarse!, porque es muy difícil encontrar en el PP a alguien con mayor crédito social y con mayor capacidad de liderazgo dentro del partido".

Tras insistir en que "tenemos el líder ideal para seguir ganando elecciones", vaticinó que todo el parido le pedirá a Aznar que no cumpla su compromiso de no presentarse a una tercera reelección en el congreso del PP que se celebrará en los primeros meses del año 2002.

Desde el punto de vista personal, Zaplana reconoció que le "incomoda" el debate sobre la sucesión de Aznar y aseguró que la mejor actitud ante este asunto es "hablar de ello cuanto menos mejor".

Sobre los supuestos movimientos de los posibles aspirante a suceder al líder del PP, el presidente valenciano dijo no haber detectado ningn movimiento; es más, insistió en que no conoce a "ningún aspirante" a ocupar ese puesto.

"Los medios de comunicación barajan nombres y es lógico, pero yo no conozco a nadie que se postule o que haga el más mínimo movimiento en ese sentido. Puede ocurrir que nadie tenga esas ambiciones o aspiraciones políticas y lo digo porque conozco bien a los que barajan como posibles sucesores", explicó.

En cuanto a su situación personal, insistió en varias ocasiones en que, además de no aspirar a ser cartel lectoral del PP, no tiene ninguna posibilidad de encumbrarse hasta ese lugar.