Rodríguez Zapatero expuso su balance del ecuador de la legislatura en un acto público celebrado en Madrid, en el que denunció "la soberbia" del Gobierno y, especialmente, de José María Aznar.

Sin reclamar explícitamente la entrevista con Aznar, Rodríguez Zapatero le lanzó una advertencia: "Si sólo quiere hablar con el PSOE a través del ataque, d la polémica y de los medios de comunicación, no está siendo un presidente de Gobierno de todos los españoles, no tiene la conciencia tranquila y es un irresponsable".

El líder socialista comenzó su alocución recordando que quedan dos años menos "para que se vaya Aznar, el PP, y pongamos fin a la etapa del Gobierno más soberbio y que menos ha hecho por los ciudadanos de este país en la historia de la democracia".

Si algo ha demostrado el Ejecutivo en estos dos años, sentenció, es "su estilo autortario, el fracaso social y la incapacidad para dar respuesta a los retos más importantes". "Ha insultado y atacado a rectores, profesores, estudiantes, jóvenes, empresarios de los medios privados de comunicación y a todo el que quiere opinar libremente".

"Es un Gobierno que a duras penas se soporta a sí mismo. Si no, no tendría explicación que Aznar siempre aparezca atacando a alguien, especialmente a la oposición y a los socialistas. Es lo que mejor aprendió en la etapa de sus estudios, allá por los ños setenta, a atacar a la izquierda y a los que han sido demócratas desde siempre", dijo Zapatero.

"HIPOCRESIA, DOBLE MORAL"

Tras las últimas críticas lanzadas por Aznar al hacer balance de su gestión, Rodríguez Zapatero respondió que un demócrata "de buena fe y con la conciencia tranquila" no tiene inconveniente en sentarse con otro partido democrático para trabajar juntos contra el terrorismo. "Si no quiere es porque no tiene la conciencia tranquila", sentenció.

Rodríguez Zapatero recordó prmesas incumplidas por Aznar, entre ellas la regeneración democrática. "¿Dónde está?", se preguntó, reclamando las responsabilidades políticas por el caso Gescartera o por la "infamia" lanzada contra Felipe González tras su reciente viaje a Marruecos.

"Qué hipocresía más grande, qué doble moral, tan exigente con los otros y tan tolerante con ellos mismos. Ese ha sido el destino de la política del Gobierno del PP", afirmó.

"El milagro se está terminando", agregó, al tiempo que alertó a sus compañers de que las críticas del PP irán en aumento. "Nos exigirán coherencia cuando sólo dividen a los españoles, exigirán lealtad a quien ha sido más leal que nadie en la historia de la democracia".

El motivo de esta acuciante ofensiva es, aseguró, que desde el 35 Congreso Federal, en julio de 2000, "el PSOE tiene 50.000 votos más cada mes y el PP 25.000 menos. Si mantenemos ese ritmo...".

Por ello, pidió a los dirigentes y militantes socialistas que no se crean los argumentos del PP y que trabajen duo al servicio de los ciudadanos para lograr en 2004 un Gobierno que consolide la calidad democrática y fomente la igualdad de oportunidades. "Quedan dos años, a trabajar duro y a ganar", les espetó.