ZAPATERO RESPALDA AL REY COMO "IMPULSOR DEL DIÁLOGO" ENTRE ARGENTINA Y URUGUAY EN EL CONFLICTO DE LAS PAPELERAS
- El monarca permanecerá en Montevideo hasta mañana y esta nochese verá con el presidente uruguayo
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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, respaldó hoy la labor que va a llevar a cabo el rey don Juan Carlos como "impulsor del diálogo" entre Argentina y Uruguay para desbloquear el conflicto por la instalación de dos industrias papeleras en el lado uruguayo del Río de la Plata.
Esa definición, reconoció Rodríguez Zapatero, se aproxima más a la realidad de lo que va a ser el papel del monarca, porque tanto la de "facilitador", en un principio atribuída por el propio Ejecutivo español, como la de "mediador", tienen un "perfil más ajustado" en diplomacia, que no viene al caso.
No obstante, en la rueda de prensa final de la XVI Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno, el mandatario español pidió que no se caiga en un "debate semántico". Lo importante es que la iniciativa, que partió del presidente argentino, Néstor Kirchner, y que Uruguay acepta, se produce porque don Juan Carlos es "querido y respaldado por ambos países" y eso es "un buen principio".
José Luis Rodríguez Zapatero no quiso avanzar más detalles sobre lo que va a ser el papel del Rey, aunque fuentes oficiosas apuntan a que don Juan carlos, que se quedará hasta mañana en Montevideo, para emprender viaje a Paraguay, aprovechará esta noche para verse con el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez.
El presidente español admitió en la rueda de prensa que va a haber "distintas reuniones", pero no quiso adelantar más detalles porque hay que actuar con "prudencia" en un conflicto "difícil".
Prueba de esto último es que la propia gestión del papel del monarca ha sido difícil. Ayer, desde la delegación argentina ponían el acento en que la iniciativa había partido del reyJuan Carlos y la delegación española ni confirmaba ni desmentía, para evitar la imagen de que Tabaré Vázquez se incorpora al diálogo sugerido por Kirchner a regañadientes.
La propuesta fue sugerida, más que propuesta, en la mañana de ayer al monarca por el presidente argentino, Néstor Kirchner, en el marco de una reunión entre ambos. Don Juan Carlos, según fuentes oficiales españolas, aceptó ejercer sus "buenos oficios", pero sólo para facilitar que los dos países hablen y sin comprometerse más allá en un asunto tan espinoso, que podría dejarle en situación desairada si las partes no se avienen a su llamamiento.
LULA FRACASÓ
El anuncio causó inicialmente sorpresa entre los enviados especiales de medios de comunicación y numerosas delegaciones que asisten esta XVI Cumbre Iberoamericana, puesto que el conflicto parece haber llegado a un punto de no retorno y nadie quiere esa 'patata caliente'.
En medios brasileños se atribuye incluso la ausencia del presidente Luis Inazio 'Lula' Da Silva a un intento de quitarse de enmedio después de haber fracasado en su intento de que Kirchner no llevara el asunto ante la Corte de Justicia Penal (CJP) de La Haya. De hecho, el malestar uruguayo con 'Lula' es notable, pues ayer aparecía tomando el sol en las playas brasileñas.
Kirchner llevó el asunto al CJP y el pasado 7 de junio falló a favor del derecho de Uruguay a permitir a la empresa finlandesa construir una papelera. La cuestión de fondo del contencioso es la construcción de una papelera por parte de la empresa finlandesa Botnia en la localidad de Fray Bentos, junto al Río de la Plata que sirve de frontera con Argentina.
Ese proyecto y el que la papelera española ENCE quiere ubicar en otra zona de Río de la Plata en Uruguay, va a significar una inversión de 1.800 millones de dólares en las escasa arcas de la economía de este país.
Mientras el Gobierno uruguayo avala las obras, su homólogo argentino afirma que el impacto medioambiental de las papeleras no fue debidamente estudiado, y por ello denunció a Montevideo por el incumplimiento del Estatuto del Río de la Plata de 1975, en vigor entre ambos países.
Sin embargo, y tras un mes de reflexión, la CIJ no encontró argumentos suficientes para aceptar la medida cautelar de paralizar las obras que había pedido Argentina. 'Lula' también pidió que se demoraran las obras de construcción 90 días pero Tabaré Vázquez no aceptó.
(SERVIMEDIA)
05 Nov 2006
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