Después de poco más de dos horas de reunión, el presidente explicó en rueda de prensa que ambos acordaron cinco principios en los que se basará una estrategia común contra ETA.

Esos principios son unidad de los demócratas, apoyo a las víctimas, confianza en el Estado de Derecho y respaldo a las fuerzas de seguridad, declaración política solemne de que el único destino de ETA es desistir de la violencia porque nunca la violencia conseguirá ningún objetivo político, y cooperación internacional.

Ambos acordaron además estudiar reformas legales para que las administraciones retiren todo tipo de insignias, placas o nombres de calles y plazas que enaltezcan el terrorismo, y para preservar los derechos de las víctimas.

También se coprometieron a materializar en septiembre la renovación del CGPJ y del TC, y en este punto el presidente se mostró seguro de que se hará, a pesar de que en la reunión de hoy no hubo nombres sobre la mesa.

Más distancia hubo ante la situación económica, ya que el presidente aseguró que Rajoy no había hecho ninguna propuesta novedosa y mantuvo su criterio de austeridad pero con solidaridad. Si el PP quiere recortar el gasto, dijo, debe decir las partidas a las que afectaría. El presidente se mostró satisfecho del resultado de una reunión que juzgó "positiva" y avanzó incluso que, si el PP actúa como está dispuesto a hacerlo el Gobierno, se podrán darpor concluidos los años de la crispación.

(SEGUIRÁ AMPLIACIÓN)