"Siempre es preferible el diálogo a la crispación, y en las relaciones exteriores esto es de manual. El ministro de Asuntos Exteriores es el jefe de la diplomacia, no de la confrontación, que es lo que hemos visto en estas últimas semanas", dijo Rodríguez Zapatero, en rueda de prensa tras la reunión del Consejo Territorial del PSOE.

Pese a discrepar de las actitudes mostradas por Marruecos, el lder socialista pidió al Ejecutivo "que recupere inmediatamente el tiempo perdido". "Los ciudadanos saben que confrontaciones de este tipo cuestan caras y las pagan los más débiles, en este caso, de ambas orillas".

De forma más concreta, Rodríguez Zapatero señaló a Ceuta y Melilla como "motivos de reflexión" para el Gobierno, junto a las relaciones comerciales con el país magrebí y la necesidad de trabajar juntos para solucionar los problemas planteados por la inmigración ilegal.

En este sentido, l Consejo Territorial del PSOE, integrado por la Comisión Ejecutiva Federal, los presidentes autonómicos y los secretarios generales de las federaciones, reiteró al Gobierno la oferta para consensuar la política de inmigración.

Ha quedado demostrado, dijo Zapatero, que la inmigración ilegal no es un problema de leyes, sino de política, "de gran política, y para muchos años".