En la sesión de control al Ejecutivo y a una pregunta del portavoz de Coalición Canaria, José Mendoza, Zapatero aseguró que el Gobierno tiene la intención de, una vez realizado un estudio profundo del informe del Consejo de Estado, "abrir una ronda de diálogo con las distintas fuerzas políticas para aproximar posiciones y explorar si existen condiciones suficientes para abordar la reforma del texto constitucional, de forma singular la reforma del Senado".

Esta ronda, según adelantó el responsable del Ejecutivo, se iniciará en el próximo período de sesiones y la Cámara Alta, a través de la ponencia de estudio que se acordó en el Debate del Estado de las Autonomías, tendrá un papel determinante y protagonista.

El presidente del Gobierno pidió a los grupos parlamentarios del Senado que, para reformar la Cámara Alta, intenten "forjar consensos", porque, a su juicio, sería "enormemente útil" para un proceso de reforma que el Gobierno "juzga absolutamente necesario para la vertebración del país, para el desarrollo del modelo territorial y para el buen funcionamiento de España".

Animó al Senado a que inicie la ponencia de estudio, porque dijo que es la institución la que decide sobre estos trabajos. "El Senado puede empezar a trabajar ya, aunque el Gobierno se haya dado un plazo hasta el próximo período de sesiones para iniciar la ronda con los partidos políticos", indicó.