Así, Zapatero se convertirá en la voz europea que hablará del denominado "Proceso de Barcelona", que enmarca las relaciones entre este continente y todos los países del Magreb, así como los de Oriente Medio.

El presidente del Gobierno será uno de los seis o siete mandatarios europeos que tomarán la palabra para exponer uno de los asuntos elegidos para tratar en el encuentro, que durará hora y media.

Siempre según las fuentes españolas consultadas, la intervención de Zapatero buscará puntos de convergencia con la iniciativa denominada "Gran Oriente Medio" que patrocina la Administración del presidente norteamericano, George W. Bush. La intervención del presidente español repasará lo hecho en los diez años que lleva en marcha el "Proceso de Barcelona".

En la reunión de Bruselas, que no sólo abarca la cumbre UE-EEUU, sino también una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN y una reunión de la Alianza Atlántica con Ucrania, no está previsto un encuentro entre Zapatero y Bush, ni se ha solicitado por parte española.

Las fuentes del Gobierno consultadas aclararon que las relaciones entre ambos países son, en estos momentos, "buenas y fluidas", pero eso no implica reunión alguna "ni formal ni informal" con el mandatario norteamericano.

Otra cuestión será que ambos dirigentes políticos, que durante la jornada del martes van a compartir mesa en reuniones y almuerzos, se saluden e intercambien algunas palabras. Pero de eso, dicen las fuentes consultadas, "no extraigamos conclusiones, porque el objetivo no ha sido ni es tener un encuentro bilateral".

Hay que tener en cuenta que la agenda del presidente de los EEUU en la capital belga va a ser muy densa de actos públicos y, si mantuviera un encuentro con Zapatero, también debería mantenerlo con otros mandatarios. Por su parte, el presidente español tampoco tiene previsto otros contactos bilaterales.