En un mitin de presentación de los candidatos socialistas a las alcaldías madrileñas, Rodríguez Zapatero, señaló que hace unos días, España, Francia e Italia pidieron "alto el fuego inmediato" en la zona, pese a las críticas de algunos dirigentes políticos que lo tacharon de "ingenuidad".

El jefe del Ejecutivo, durante su intervención en el pabellón polideportivo de la Fundación Once, ironizó de que se alegraba, "con toda humildad", de que los críticos se hayan equivocado, que finalmente se haya producido este cese de la violencia y que se pueda abrir una vía para lograr la paz en la zona.

A este respecto, Rodríguez Zapatero aprovechó para decir que los socialistas tienen dos grandes fortalezas de cara al progreso del mundo. La primera fortaleza, dijo, es la de movilizarse, "no podemos seguir contemplando tanta miseria, tanta pobreza, tanta hambre en muchos países del mundo, y hay que hacer que toda la comunidad internacional y los países desarrollados lleguemos al 0,7 de ayuda al desarrollo, y hagamos una inversión sólida en el futuro de África, de Latinoamérica y de tantos otros países".

Y, como segunda fortaleza, señaló, la "fuerza de la paz" como "la ideología más sólida, la más creativa, la más constructiva, para este siglo XXI, que ha de ser radicalmente mejor que el siglo XX.