En la reunión asisten también el Secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, y el Director del Centro Nacional de Inteligencia, Alberto Sainz, se analizan los diferentes riesgos que atraviesa España en estas horas.

Nada más conocer los atentados, según ha revelado él mismo en la declaración al país que formuló a las 14.00 horas, Rodríguez Zapatero ordenó al ministro del Interior que activara los sistemas de alerta.

En ese mismo momento, el Ministerio del Interior hizo público un comunicado en el que detalla que se había activado el nivel de máxima alerta "para prevenir atentados terroristas".

Tras hacer una evaluación de la situación en Londres, el ministro Alonso dió instrucciones a sus colaboradores para activar el máximo nivel de alerta y operatividad recogido en el Plan de Prevención y Protección Antiterrorista (Nivel 3).

VIGILANCIA DE EDIFICIOS

Este nivel de alerta, según el comunicado, implica la "absoluta movilización" de las Fuerzas de Seguridad "para vigilar y proteger los lugares de alta concentración de personas, así como los objetivos estratégicos imprescindibles para el normal funcionamiento de la actividad ciudadana".

Entre estos lugares en los que se mejorará la vigilancia se encuentran las grandes superficies comerciales, las grandes infraestructuras de transportes, los acontecimientos deportivos y las áreas o edificios emblemáticos de las ciudades en las que puede darse una afluencia masiva de personas.

Por lo que se refiere a los objetivos estratégicos, los que se consideran más importantes son los relacionados con el sector energético, los centros de abastecimiento de hidrocarburos, las plantas de regasificación, las redes de agua potable y, entre otros, los centros de comunicaciones.

Además, las Fuerzas Armadas realizarán tareas de apoyo en la vigilancia y protección de las grandes infraestructuras de transportes, de los objetivos estratégicos y del espacio aéreo.