Sólo habrá un leve retoque en el ministerio más antiguo del organigrama de la Administración, el Ministerio de Asuntos Exteriores, que ahora pasa a ser de Asuntos Exteriores y Cooperación.

Atrás quedan los intentos de cambiar de nombre al Ministerio del Interior por Ministeriode Seguridad, que llegó a anunciar el propio Zapatero; o Ministerio de Fomento por el de Infraestructuras. En cambiar membretes oficiales y cartelería el gasto iba a suponer decenas de millones de pesetas a añadir al dinero necesario para crear esos tres nuevos departamentos.

El gabinete de Zapatero quiere realizar próximamente un ajuste presupuestario para hacer frente al gasto extraordinario que va a suponer, por ejemplo, la puesta en práctica de una Ley Integral contra la Violencia Doméstica, que s aprobará en el segundo Consejo de Ministros, el próximo viernes.

Los socialistas quieren un plan de choque en dos asuntos que preocupan a la ciudadanía: Vivienda y Educación. De hecho, el presidente del Gobierno anunció en su investidura un plan de becas estudiantiles.

Además, en el caso de Interior no se queía caer en la contradicción de defender un aumento de las plantillas de Policía y Guardia Civil de 36.000 efectivos en una legislatura, aprobando por otro lado un gasto que se considera supéfluo.