ZAPATERO CREE QUE "NO DEBEMOS DRAMATIZAR" PORFALTA DE ACUERDO EN EL REPARTO DE FONDOS DE COHESIÓN
- El presidente dice que hay consenso en no construir una Europa "a espaldas de los ciudadanos"
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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy en el Congreso de los Diputados que "no debemos dramatizar" por la falta de acuerdo sobre el Presupuesto de la UE 2007-2013, incluído el reparto de los fondos de cohesión.
Durante su discurso inicial de comparecencia para explicar los resultados de la reciente "cumbre" de jefes de Estado y de Gobierno de la UE, Rodríguez Zapatero comentó que hay que "comprender" lo ocurrido, porque se trataba de fijar el marco financiero de una UE de 27 Estados miembros cuando acabe ese presupuesto.
En su opinión, habrá que hacer para la próxima "cumbre" de octubre "ajustes en la definición de los intereses nacionales", presididos por la solidaridad entre todos los países.
Zapatero subrayó que quedan doce meses para negociar un presupuesto que entra en vigor el 1 de enero de 2007 y habrá acuerdo, porque "es mucho más lo que nos necesitamos unos a otros".
"No hay vuelta atrás", dijo el presidente a quienes hablan de profunda crisis, que él limita a una seria preocupación. "La UE sigue constituyendo para todos una garantía de prosperidad, seguridad y paz a la que no podemos renunciar. Si hemos de dar pasos adelante, mi Gobierno está dispuesto"
En las negociaciones del pasado fin de semana, agregó, concurrían unas circunstancias que le daban "complejidad" al acuerdo: es para 27 miembros, 12 de ellos nuevos, en medio de una crisis económica en países contribuyentes como Alemania. "Ese solo dato obliga al replanteamiento de bien asentados equilibrios financieros en otras épocas", añadió en referencia al famosos "cheque" británico.
PROPUESTA JUNCKER
España, dijo Zapatero, acepta que ha crecido económicamente durante los últimos quince años y está dispuesta a "ser solidarios con los nuevos estados miembros".
España, "que tanto ha progresado" con los fondos UE (97.000 millones de euros desde 1993), no puede dejar de reconocer esa la necesidad de los nuevos países miembros, agregó.
El primer ministro británico, Tony Blair, sólo está dispuesto a una reducción del cheque si paralelamente se reforma sustancialmente la Política Agraria Común (PAC), que se come un 40% del Presupuesto y cuyos primeros beneficiarios son Francia y España, por este orden.
A este respecto, el presidente español ha alabado la última propuesta que presentó "in extremis" el presidente de turno de la UE, el luxemburgués Jean Claude Juncker: un período transitorio de cuatro años para que España siguiera recibiendo fondos de cohesión hasta sumar 5.000 millones de euros.
Una fórmula que para el Ejecutivo es "muy positiva de cara al trabajo de negociación futura", es decir, como base de partida, pero no aceptable, porque al reducirse al 1% del PIB de la UE el presupuesto 2007-2013, haberlo aceptado sin más "podría crearse una situación injusta para España con un reparto no equitativo de las cargas de la ampliación".
De hecho, prosiguió Zapatero, el saldo neto no era satisfactorio, porque junto con los cuatro años más de fondos de cohesión la aportación de España al cheque británico se habría visto incrementada.
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo ha recalcado que su convicción es que "Europa sigue siendo el futuro, la mejor solución para los retos del mundo actual. No es la primera vez ni será la última que la UE se enfrenta a dificultades".
"A ESPALDAS DE LOS CIUDADANOS"
En "gran medida", remarcó José Luis Rodríguez Zapatero, la posición final de la "cumbre" de Bruselas respecto al frenazo en la ratificación de la Constitución Europea, es la que defendía España de partida.
"Debemos hacer llegar a los ciudadanos el mensaje claro y comprometido de que la Unión no se construye ni nunca se construirá a sus espaldas", afirmó el jefe del Ejecutivo español para explicar la decisión de la UE de aplazar a junio de 2006 la evaluación del proceso de ratificación, después del "no" en Francia y Holanda y la congelación del referéndum en Gran Bretaña.
Hay que evitar, prosiguió, "que la crisis en que se encuentra el Tratado Constitucional pueda derivar hacia una crisis más profunda de la Unión". "Aunque nos encontramos en un momento de incertidumbre, seguiremos avanzando. Siempre ha ocurrido así en la historia de la UE", concluyó Zapatero en su primer turno de palabra.
(SERVIMEDIA)
22 Jun 2005
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