Preguntado por los periodistas sobre la continuidad del proceso de construcción europea en los pasillos del Congreso de los Diputados, donde acudió a votar el techo de gasto para 2006, Rodríguez Zapatero se limitó a decir: "sí, claro".

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, indicó, en declaraciones también en la Cámara Baja, que el resultado en Holanda es "una dificultad añadida, que no cambia la posición del Gobierno", puesto que hay que seguir con el proceso de ratificación.

El máximo responsable de la diplomacia española recalcó que la "reflexión política" que se abre con estos dos referendos "no significa un parón o un retraso en el calendario del proceso de ratificación".

"España tendrá una posición activa en el Consejo, es un Gobierno con legitimidad y con suficiente credibilidad política para jugar un papel activo", por el apoyo que sus ciudadanos dieron al tratado constitucional, consideró el ministro.

En cuanto a la posibilidad de revisar el texto constitucional, Moratinos recalcó que fue firmado por los 25 países y que hay que esperar al final del proceso de ratificación por vía de consultas populares para hacer una evolución política.