El accidente ocurrió sobre las 10,30 de la mañana, cuando el barco de paseo, cargado de turistas procedentes de La Rochelle (Francia), desatracaba del embarcadero y comenzó a hundirse por la popa, por causas aún desconocidas.

Muchos de los jubilados pudieron saltar al agua cuando la embarcación comenzó a hundirse pero el resto de excursionistas quedaron atrapados en el baro.

En el lugar del suceso se encuentran efectivos de los Bomberos de la Generalitat, de los Mossos d'Esquadra, de Cruz Roja y de la Policía Local de Banyoles, que trabajan en el rescate de los cadáveres y de los náufragos.

Unos 78 jubilados heridos han sido trasladados al Hospital de Banyoles y al Hospital Josep Trueta de Gerona. En este último centro quedaron ingresados en estado grave seis personas, cinco mujeres y un hombre de entre 60 y 70 años, y no se descarta la llegada de nuevos heridos pocedentes del lago de Banyoles.

Además, un autobús con alrededor de 60 personas ha llegado al Josep Trueta para pasar una revisión médica, ya que su estado no parece en principio grave.

Por su parte, el Hospital de Banyoles ha informado que han ingresado entre 30 y 40 personas con heridas de distinta consideración.

La embarcación, que está siendo recuperada del agua con una grúa, tenía menos de un año de antigüedad y navegaba con un motor eléctrico.

El número de víctimas puede aumentar,debido a los ingresados en estado grave y a que varias personas han desaparecido tras el hundimiento del barco.

La delegada del Gobierno en Cataluña, Julia García Valdecasas, ha calificado de "desgraciado accidente imprevisible" el suceso y ha anunciado que ya se está preparando la repatriación de los cadáveres.