Los resultados serían excepcionales para el gobierno de Manuel Fraga si se lograra bajar de 1 hectárea por foco declarado, teniendo en cuenta que la media en España fue de 6,4 ha. en el 93.

El índice fue en Galicia de 1,10 ha. por incendio, lo que hace difícil el reto de mejorar. La aspiración de la administración gallega es logar la reducción drástica de los incendios importantes, de modo que sólo superen las 25 hectáreas de superficie quemada entre el 0,50 y el 1,50 por ciento de los siniestros declarados.

Las cuatro delegaciones provinciales de la Consejería de Agricultura de la Xunta han recibido durante las últimas semanas en torno a 7.000 solicitudes de personas que desean trabajar en labores de prevención o extinción de incendios como capataces, técnicos, conductores, vigilantes, técnicos, emisoristas, operadores-codiicadores de datos o peones.

Las provincias con más solicitudes fueron las de Pontevedra, con 2.100, y Lugo, con 2.300, seguidas de La Coruña, con unas 1.300, y Orense, con más de 1.200, informaron a Servimedia fuentes de la administración autonómica.

La Xunta movilizará este año unas 3.200 personas bajo su coordinación para tratar de mantener el éxito de campañas anteriores contra los incendios forestales. A estos medios humanos se suman además algunas cuadrillas subvencionadas por convenio a ayutamientos o comunidades vecinales.

Ni la mitad de las solicitudes obtendrán respuesta positiva durante los meses de verano, toda vez que ya hay personas en labores de prevención y extinción contratados después de una primera convocatoria publicada en enero.

La Xunta movilizará a más de mil personas integradas en más de 300 cuadrillas de tierra durante la época de máximo riesgo. Otras 36 cuadrillas viajarán en helicóptero a los lugares de los incendios, mientras que habrá 404 vigliantes en 138 puetos fijos y 414 conductores y ayudantes se ocuparán de manejar 138 vehículos motobomba.

Como medios aéreos, la Xunta dispondrá de 10 helicópteros propios y 4 del ICONA, así como de dos aviones ligeros propios y dos aviones anfibios también cedidos por el ICONA para actuar en Galicia.

Asimismo para mejorar la lucha contra los siniestros, la Xunta pedirá al Gobierno central una nueva ley de incendios forestales, según anunció Fraga, por estimar que la vigente de 1968 no es la adecuada para las nuevs circunstancias y medios técnicos.

El dispositivo aprobado para luchar contra los incendios forestales en 1994 mantiene una especial atención a las 80 zonas catalogadas como de especial interés ecológicos, en torno a zonas húmedas y bosques de especial riqueza. De estas zonas ecológicas, 27 están en Pontevedra, 23 en La Coruña, 16 en Lugo y 14 en Orense.