El texto, además, insta a que se “revisen” todas las decisiones acordadas en el Parlamento “en vista de los abrumadores argumentos sobre su incompatibilidad con la Constitución, de modo que evite la realización de cualquier ulterior acto de tramitación que pueda permitir su aprobación definitiva por las Cortes Generales”.

No obstante, la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, admitió que, pese a estas acciones, “es inevitable” que la amnistía llegue al Pleno del jueves porque es una decisión que depende de la Mesa de la Cámara Baja, donde PSOE y Sumar tienen mayoría, y cargó también contra el PP por no haber parado su tramitación en el Senado.

El escrito, de seis páginas, incide en que la amnistía es una “moneda de cambio en unas negociaciones parlamentarias corruptas” para amarrar los “votos parlamentarios que el actual Gobierno necesitó para su acceso al poder”. Y denuncia que “se ha convertido para sus impulsores en un instrumento propagandístico de primer orden”.

”BANDERA ELECTORAL”

“Las fuerzas políticas promotoras de la proposición tienen un claro interés partidista en que su aprobación parlamentaria tenga lugar en el plazo más breve posible, y ello por varias razones básicas de táctica y estrategia políticas que no es oportuno considerar aquí. Pero también tienen una razón de carácter más inmediato: la cercanía de las elecciones al Parlamento Europeo que se celebrarán el próximo día 9 de junio”, advierte Vox.

“Los impulsores han convertido a la amnistía en una bandera electoral, con el argumento de que ha contribuido a la pacificación social y política en dicha región; un argumento que por lo demás es falaz, al tratarse de una profecía autocumplida. Lo cierto es que llevar a cabo la aprobación parlamentaria definitiva de la proposición en días inmediatamente anteriores a las citadas elecciones al Parlamento Europeo constituye una intromisión intolerable en la ya iniciada campaña electoral, así como una contravención de los principios de neutralidad”, prosigue el texto.

Por ello, Vox quiere que la Mesa del Congreso acuerde la retirada del punto relativo al veto del Senado de la amnistía para “salvaguardar el principio de neutralidad de los poderes públicos en la actual campaña” de las europeas.