Izquierda Unida solicitó la comparecencia del ministro enla Comisión de Interior del Congreso y, ante la falta de respuesta, volvió a presentar una solicitud urgente junto al Grupo Mixto para conocer la visión del Gobierno ante un hecho "que ha conmocionado a la sociedad española".

Meyer reiteró en los pasillos del Congreso que este asesinato lo cometió "una banda organizada, paramilitar, de ultraderecha" que está estructurada en todo el país y, por tanto, en su opinión, el suceso tuvo un "móvil político".

Además, advirtió que estas bandas se están conirtiendo en "un problema muy serio" para la seguridad, porque convierten en objetivos de sus ataques "a vascos, a negros, a prostitutas, a homosexuales", y la situación requiere una reflexión profunda del Ministerio del Interior.

Para Meyer, es necesario que el Gobierno estudie un operativo que desmantele este tipo de bandas y exija a los clubes de fútbol que no den trato preferente alguno a sus miembros y que les prohíban la entrada en los campos de juego.