UN VIGILANTE DE SEGURIDAD TEME HABER CONTRAIDO EL SIDA TRAS SER AGREDIDO POR UN TOXICOMANO CON UNA JERINGUILLA EN PAMPLONA

PAMPLONA
SERVIMEDIA

El guarda de seguridad Juan Carlos Picón, empleado de la empresa Serramar, fue agredido anoche por tres toxicómanos, uno de los cuales le pinhó en el brazo con una jeringuilla mientras hacía la ronda nocturna en las inmediaciones de la empresa Liebher Industrias Metálicas, ubicada en la Avenida de Guipúzcoa de Pamplona.

La agresión se produjo sobre las dos de la madrugada, cuando los tres supuestos toxicómanos, que se encontraban ocultos tras unas estructuras metálicas, abordaron al vigilante jurado y comenzaron a golpearle.

Mientras Juan Carlos Picón repelía el ataque con su porra, uno de los jóvenes le clavó una jeringuilla y le proujo tres heridas de unos tres centímetros en el brazo. Tras el enfrentamiento, los asaltantes consiguieron huir.

El vigilante jurado llamó al 091, siendo inmediatamente atendido por agentes de la policía, que le trasladaron al servicio de urgencias del Hospital de Navarra, donde le extrajeron sangre para realizar las pruebas del sida.

"Solo pensaba en que me podían haber traspasado la enfermedad", señaló Juan Carlos Picón en declaraciones al rotativo "Diario de Navarra". "Eso es criminal y no me oy a quedar tranquilo hasta ver el resultado de las pruebas", añadió.

La zona en la que se produjo la agresión es muy frecuentada por traficantes de droga, que realizan sus operaciones en una arboleda cercana a la empresa Liebher.

La Guardia Civil había solicitado colaboración de los guardas jurados para que aportaran datos que permitieran identificar a los supuestos traficantes que operan en la zona y éstos, a su vez, habían amenazado en varias ocasiones a los vigilantes nocturnos, aunque hasta hora nunca se habían producido agresiones.

(SERVIMEDIA)
21 Ago 1993
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