Garrido recuerda que cinco personas -dos de ellas participantes en la carrera- han muerto durante la última edición del rally, que antes de llegar a Africa transcurrió por distintos lugares de España.

Ante ello, el diputado "verde" ha presentado una proposición no se ley para que, en futuras ediciones, se prohíba el tránsito de los participantes por carreteras españolas.

Francisco Garrido considera que además de tratarse de "un espectáculo de exhibición de la agresividad y el despilfarro de la industria del automóvil y un modelo de fomento de la conducción agresiva y violenta, el hecho de transcurrir, en gran medida, por países pobres, le añade un escandaloso plus de exhibicionismo opulento, insoportable para cualquier conciencia solidaria".

A su juicio, todo esto contrasta con "un momento de fuerte campaña contra la conducción violenta, de apoyo al ahorro energético, de disminución de la contaminación y de promoción de las actitudes solidarias con el Tercer Mundo".