Asimismo, Salvador Santos Campano, presidente de la asociación, declaró que los fabricantes de turrón artesano han disminuido su producciónun 30 por ciento, "conscientes del menor poder adquisitivo de los madrileños y, fundamentalmente, de la menor demanda de turrones como consecuencia de la crisis económica".

Los fabricantes han sustituido, en parte, los productos más caros, como turrones, por otras variedades de dulces navideños más asequibles, como mazapán, mantecados y polvorones.

Los precios no han experimentado subidas apreciables, según los empresarios del sector, con el fin de mantener la demanda. Así, un kilo de mazapán tenrá un precio aproximado de 2.000 pesetas, por 1.500 de los polvorones.

Por otra parte, las aproximadamente mil pastelerías de la comunidad no podrán compensar el descenso de ingresos por ventas de dulces típicos de la estación con una mayor demanda de regalos navideños, como era costumbre en los últimos años.

La facturación del sector descenderá en este capítulo, según Santos, en un 50 por ciento. "Estamos en una crisis económica similar a la que padecimos en 1973. El sector se va a ver afectado or los graves problemas financieros que atraviesan las empresas y el fuerte descenso en los presupuestos destinados a atenciones a clientes", afirmó.