Según informó hoy el Ministerior del Interior, las investigaciones comenzaron en noviembre de 2003, al detectarse la presencia de un pequeño grupo de ciudadanos búlgaros que acababan de asentarse en Gandia.

Los investigados realizaron un importante desembolso de dinero para adquirir una serie de naves en un polígono industrial de la localidad y crearon posteriormente la sociedad "Adoni Kasida Internacional S.L.", dedicada a la reparación de automóviles.

Los agentes constataron que existía una gran desproporción entre la inversión inicial realizada y el escaso volumen de trabajo generado por esta sociedad, por lo que sospecharon que la empresa estaba siendo utilizada como "tapadera" de actividades ilícitas.

A través de las investigaciones propias y con el apoyo del Servicio de Vigilancia Aduanera, la policía supo de la exportación hacia Bulgaria de vehículos (camiones y automóviles) adquiridos supuestamente en España en el mercado de segunda mano.

Sin embargo, se comprobó que los datos que figuraban en la documentación de exportación de estos vehículos correspondían a vehículos que permanecían en territorio español bajo el control de sus legítimos propietarios o bien dados de baja por siniestro total tras haber sufrido un accidente.

Los agentes descubrieron además la conexión de la empresa investigada con otra establecida en Bartholoma (Alemania), denominada "Welt on Intgernationales Autohandel" y cuyo propietario estaba siendo investigado en Francia y Grecia, detectándose un trasiego de vehículos entre ambas empresas.

En los registros efectuados han sido intervenidos, entre otros efectos, treinta y ocho vehículos de gama alta, 55.755 euros, ordenadores, tarjetas de memoria, módulos técnicos de vehículos, numerosas placas de matrícula, cinco teléfonos móviles, etc.

Además de al robo y exportación de vehículos, los detenidos se dedicaban también presuntamente a la clonación de tarjetas de crédito y a la comisión de otros delitos.