Maragall ha acordado con sus socios de Gobierno una profunda reestructuración de las consejerías cuando el Estatuto está en el Senado y tiene pendiente uno de los pasos esenciales, el referéndum.

Las reticencias de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ante el texto que salió del Congreso de los Diputados y la postura que mantenga en el Senado y en el reférendum ha sido esgrimido por algunos como un aspecto clave para su futuro en el tripartito de Maragall.

Al ser preguntada por este asunto en el encuentro informativo organizado por el Foro Europa Press, María Teresa Fernández de la Vega aseguró que la crisis de Gobierno en Cataluña "ni puede, ni debe ni va" a influir en la tramitación del texto.

Fernández de la Vega dio por hecha esa reestructuración y la enmarcó en la más estricta normalidad dentro de las competencias de un presidente.

Recordó, de hecho, que José Luis Rodríguez Zapatero ha remodelado recientemente la composición del Consejo de Ministros sin que ello haya alterado, aseguró, la marcha normal de la acción del Ejecutivo.

En su intervención, la vicepresidenta primera aseguró que las reformas emprendidas son la mejor política de vertebración e integración, que no se logra "solemnizando el estatus quo", sino afrontando con valentía las modificaciones necesarias para responder a los nuevos retos.

Fernández de la Vega esbozó un balance "razonablemente positivo" de los dos años de gestión del Gobierno y aseguró que el objetivo de los dos siguientes es consolidar la confianza de los ciudadanos en su propia capacidad de afrontar esos retos.