La número dos del Ejecutivo respondía así a las reclamaciones planteadas por Esquerra en una interpelación urgente sobre la racionalización y reducción de la estructura de la Administración General del Estado.

En su intervención inicial, Ridao reprochó a los sucesivos ejecutivos centrales su "continuada deslealtad institucional", que desemboca en una concurrencia competencial y se manifiesta en "duplicidad de funciones" e ineficacia a la hora de prestar servicios a los ciudadanos.

A su juicio, los criterios de eficacia y austeridad en la Administración pública pasan por el "adelgazamiento" de la Administración central y el cumplimiento de la legislación sobre desarrollo autonómico.

Ridao advirtió a la vicepresidenta de que el Gobierno se encuentra ante la disyuntiva de "pactar con el PP la involución o acordar con los reformistas periféricos una salida a la crisis y la solución a la financiación y el autogobierno de las comunidades autónomas".

Para Esquerra, las reformas estructurales que precisa el modelo económico van "íntimamente unidas a un nuevo modelo de Estado", que implique el reconocimiento de una financiación adecuada para que las comunidades autónomas puedan asumir su mayor nivel competencial.

En cambio, el actual Gobierno, denunció, aumenta el número de ministerios, algunos de los cuales "no deberían existir", contrata altos cargos y aumenta el número de vicepresidencias, en lugar de aplicar criterios de austeridad.

MÁS TRANSPARENCIA

Además, el portavoz independentista reclamó una regulación del uso de medios públicos para actividades privadas del presidente del Gobierno y los miembros de su gabinete. De la Vega confirmó, en este caso, que el Ejecutivo está dispuesto a "completar" la legislación actual en esta materia, "para dar mayor transparencia", que ya está regulada y es "respetada" por todos los miembros del Gobierno.

La vicepresidenta aseguró que el Ejecutivo está haciendo "un gran esfuerzo de austeridad, eficacia y ahorro" y negó con contundencia la acusación de "deslealtad" que le lanzó Ridao. En ese sentido, aseguró que en los últimos años el gasto imputable al Estado ha pasado del 40% al 20%, mientras que el de las comunidades autónomas se ha duplicado "de poco más del 20% al 40%".

"La tendencia", por tanto, "se ha invertido de manera clara y rotunda" y "nos felicitamos" por ello, dijo, porque "creemos en el Estado de las Autonomías y no estamos sufriendo por la unidad de España".

Ridao insistió en su réplica en que "el Estado debe adelgazarse", porque en los últimos tiempos "ha engordado mucho, no sabemos si hasta llegar a la bulimia", y para comprobarlo ERC esperará a conocer la propuesta de financiación autonómica que el Gobierno piensa tener lista a mediados de junio.

Para concluir, De la Vega abogó por "un Estado fuerte, que no significa amplio", y advirtió de que el Gobierno no está dispuesto a que "desaparezca", alentado por la convicción de que "el Estado y las autonomías deben y pueden convivir".

En suma, la vicepresidenta primera del Gobierno se mostró receptiva a las propuesta de reestructuración de la Administración, afirmó que sólo habrá "reducción si procede" y adelantó que habrá "financiación autonómica, pronto y buena".